Escala de la Segunda Escuadra del Pacífico en Vigo, la primera guerra mundial pudo comenzar aquí.


El 25 de octubre de 1904 hizo su aparición ante el puerto de Vigo el Segundo Escuadrón del Pacífico, perteneciente a la Armada Imperial Rusa. El almirante Rozhdestvensky, al mando de la flota, llevaba 4 noches sin dormir y sin abandonar el puente tras el combate de Dogger Bank . Fue cerca de la costa española donde se enteró que, en vez de contra torpederas japonesas, el combate del día 21 había ocurrido contra un grupo de pesqueros, que estaba a punto de estallar la guerra con Gran Bretaña, y que él era el responsable.

Zinovy Rozhestvensky

 

El puerto de Vigo, parecía un lugar que no causaría problemas en el trayecto que conducía a la flota al lejano oriente, tenía unas excepcionales instalaciones, le esperaban 5 transportes repletos de carbón, disponía de telégrafo con conexión ‘directa’ a San Petersburgo, e incluso había un consulado ruso.

El primer cable que el Almirante, envió al Zar a la llegada a puerto (26/10/1904), podemos decir que fue ‘escueto’, quizás receloso de la seguridad del medio que estaba utilizando:

Llegué con el primer destacamento de buques de guerra

Crisis política

Nicolás II ya conocía los hechos del 21 de octubre, y el estado de excitación que reinaba en Inglaterra. El Zar estimaba que la conducta de los ingleses era demasiado ‘audaz’, cada vez se enfurecía más con las noticias que provenían de, como empezó a llamar a los ingleses, ‘nuestros sucios enemigos’. Por otro lado, Eduardo VII hervía de indignación, calificando el suceso de Hull como ‘ruin atentado’.

Zar Nicolás II

Este enfrentamiento político entre Rusia e Inglaterra no fue desperdiciado por otras potencias. El Kaiser Guillermo II, que llevaba tiempo intentando atraer a Rusia a su esfera de influencia, cablegrafiaba en estos días a su sobrino el Zar Nicolas II a propósito del incidente Dogger Bank y, en relación al peligro británico manifestaba

[el peligro británico] debe de enfrentarse en conjunto, con Rusia y Alemania unidas, quienes tendrán que recordarle a su aliado Francia, las obligaciones a las que se ha comprometidos por el tratado de alianza contigo

Como vemos alta política a golpe de cablegrafía, un sistema no muy seguro. Los franceses al enterarse de esta maquinaciones del Kaiser, montaron en cólera. Recordemos que Francia era aliada de Rusia desde hace 10 años, pero también era aliada de Inglaterra desde la firma de la Entente Cordiale hacía 6 años. Su posición entre aliados favoreció su papel de moderadora, Delcasse ministro de Esteriores francés, pidió al embajador ruso en Paris

Es absolutamente vital para su gobierno enviar de inmediato un cortés mensaje de disculpas, que es lo única que podrá evitar la crisis

Rusia, estaba dispuesta a pagar una indemnización, quizás también a disculparse. Pero Inglaterra exigía que se castigara a Rozhdestvensky y mientras no se solucionase el conflicto diplomático la flota rusa debería quedar internada en Vigo. Como más adelante contaremos, en la bocana de Vigo se encontraban 5 cruceros ingleses vigilando cualquier movimiento de la escuadra rusa.

El agregado naval ruso en Londres cablegrafió a Rozhdestvensky a Vigo, comunicándole el estado de nerviosismo e inquina que reinaba en la capital inglesa. El Almirante les contestó con un mensaje ya no tan escueto, exponiendo su punto de vista (el cual siguió defendiendo hasta su muerte) :

El incidente del Mar del Norte fue ocasionado por la acción de dos torpederos que navegaban a todo vapor encubiertos por las sombras de la noche, son luces, en dirección al barco que encabezaba nuestro destacamento. Sólo después de que encendimos nuestros reflectores se advirtió que unos cuantos vapores pequeños que parecían pesqueros se hallaban en las inmediaciones. El destacamento se esforzó por no tocar con sus disparos esas embarcaciones  el fuego cesó en cuanto los torpederos desaparecieron de nuestra vista.

Se acusaba también a la escuadra rusa de que, en el lugar de los hechos, había permanecido un buque torpedero ruso haciendo caso omiso del deber de rescate de los pescadores que habían caído al mar. Pero en la escuadra no iba ninguna embarcación de ese tipo, incluso se hicieron averiguaciones en países como Dinamarca, para averiguar el origen de este misterioso buque, pero no obtuvieron solución alguna.

Las autoridades españolas, temerosas de la ira de Londres, prohibieron aprovisionarse a la escuadra, a pesar que se encontraban en el puerto 5 carboneros de la Amerika Hambourg Linie, pagados por el gobierno ruso y que enarbolaban el pabellon ruso, en un flagrante incumplimiento de las leyes de neutralidad. El Almirante no se arredró y continuó insistiendo hasta que le permitieron reabastecerse, limitadamente diríamos (400 toneladas de carbón a cada buque). El 27 de octubre por la noche los oficiales rusos pusieron a todo el mundo a trabajar en las labores de carga de carbón, cuando amaneció cada barco ya se había aprovisionado de más del doble de la cantidad autorizada. El Escuadrón ya podía seguir su marcha, ya que disponía de suficientes reservas de combustible como para llegar a Tanger.

Si la tensión se podía cortar entre las autoridades españolas y el mando de la flota rusa, no era igual con el pueblo de Vigo, tal como escribe Semenov que vivió los hechos en primera persona :

Cuando el almirante bajó a tierra para saludar al gobernador, a su salida del palacio la multitud le aclamó en la calle. Los periódicos locales decían de una manera asaz clara, que «el enemigo de la aliada de nuestro enemigo era, por el hecho mismo, nuestro amigo»

Escuadra rusa en Vigo

Escuadra rusa en Vigo

Crisis militar

Podemos ver que los ánimos se encontraban encendidos a nivel político cuando la flota arribó a Vigo. Pero eso no era todo. La Home Fleet inglesa, que se encontraba de maniobras en Escocia, empezó a reunirse en el Canal de la Mancha, la Flota del Mediterráneo a su vez recibió la orden de concentrarse en Malta, y la flota del Canal se concentró en Gibraltar; incluso se puso en alerta al China-squadron en el lejano oriente.

Las cosas eran más serias de lo que parecía. Se mandaron ordenes de ‘hacer preparativos para entrar en acción y estar listos para cumplir ordenes de inmediato’ así como de ‘hundir cualquier barco que intentara entrar por la fuerza en el puerto de Gibraltar’. Y se enviaron 5 cruceros ingleses a las inmediaciones de Vigo para vigilar los movimientos de la flota rusa.

El 31 de octubre la flota rusa aparejó para salir de Vigo al día siguiente, el almirante inglés Beresford en Gibraltar cablegrafió en esta fecha a Londres,

Estoy listo para partir a todo vapor y dispuesto a actuar en cuanto reciba telegrama del Almirantazgo… Cuando se me ordene, haré que la flota rusa de Tanger entre en Gibraltar, y se me desobedecen serán cañoneados y hundidos… luego iré a enfrentar la flota de Vigo, que mis cruceros tienen la orden de perseguir.

Se prepararon para salir 11 acorazados, 3 cruceros, 7 torpederos y 3 destructores, una fuerza muy superiora la flota rusa. Ante la preocupación que ocasionó entre la flota esta noticia Rozhdestvensky comentó :

Sólo seremos capaces de enfrentar a los cuatro primeros acorazados, de modo que no importa cuantos sean los que acabarán con nosotros después… si veinticuatro o ciento veinticuatro.

Vemos un humor especial en este personaje, que no quita para que, leyendo entre líneas, veamos lo consciente que era de la preparación y estado de los barcos a su mando.

Solución de la crisis

El 29 de octubre el Zar propuso a Londres someter el asunto a una comisión internacional de investigación, tal como establece el protocolo de la Conferencia de la Haya. El Kaiser, no le gustó el giro conciliador de su sobrino, pero Nicolas II, que estaba convencido de que había habido juego sucio, no podía permitirse una guerra con Inglaterra.

Londres aceptó la propuesta rusa, creándose una comisión internacional formada por Almirantes, que investigaría el incidente de Dogger Bank. Rozhdestvensky debía de dejar en Vigo a cuatro oficiales que servirían de testigos. Aún así, la flota no se encontraba libre de seguir con su camino.

A las 7 de la mañana del 1 de noviembre de 1904 el segundo escuadrón del Pacifico dejó el puerto de Vigo, a distancia los cruceros ingleses seguían su estela. El almirante al observalos desde el puente de mando del acorazado Kniaz Souvorov, nos da otra muestra de su sentido del humor (o pragmatismo ruso, según se mire)

No podríamos tener mejores guardianes. Los saboteadores japoneses jamas se atreverían a atacarnos.

Pero la tensión no había desaparecido. El gobierno británico tomó la partida como un verdadero ‘cassus belli’. Como último despropósito de este suceso, tras la partida de la flota rusa, llegó un telegrama de San Petersburgo con ordenes de que permaneciera en el puerto de Vigo hasta nueva orden.

Las excusas oficiales del gobierno ruso llegaron a Londres el 5 de noviembre, y se pagaron 65000 libras como compensación a las familias de las victimas del incidente de Dogger Bank. De esta forma, ahora sí, la crisis quedó definitivamente cerrada.

Y hasta aquí la historia de como la Primera Guerra Mundial, estuvo a punto de empezar en Vigo.

Si quieres saber más,

  • PIOUFRE, Gerard. La guerre ruso japonaise sur mer, Nantes: Marines édition, 1999
  • PLESHAKOV, Constantine, La última armada del Zar.Madrid : Turner Publicaciones, 2003
  • SEMENOV, Vladimir. La expiación (continuación), Camino del Sacrificio, Barcelona: Seix Barral Hnos, 1912